"Las Constelaciones Familiares son reveladoras de las cuestiones ocultas y de los sentimientos no registrados, de la generación actual y de las anteriores, que están y tienen sus efectos. Por eso son una modalidad terapéutica que va a la raíz del conflicto, no al síntoma."
Muchas personas consultan por qué no les va bien con su pareja actual o por qué no pueden conseguir pareja o por qué se separaron de una ella, pero no pueden terminar con esa relación.
Cuando pregunto por parejas anteriores, me suelen decir que todo bien, que ya eso se acabó y cosas parecidas. Y en las parejas que se terminaron, pero que no pueden cortar, también hay ideas ilusorias al respecto que alimentan sentimientos perturbadores, y la relación “terminada” es un sufrimiento continuo, y a veces por mucho tiempo.
José consulta porque está en pareja hace tres años con una mujer, que ya es su segunda mujer, y que las cosas no andan bien, que no quiere separarse, que creyó que esta sería su última pareja, pero que si siguen así discutiendo van a terminar separándose.
Le pregunto por su pareja anterior y me dice “todo tranquilo”. Le digo que vamos a constelar su pareja anterior. Me dice que él tiene problemas con su pareja actual, que con la otra sólo hay algunas asperezas en algunas cuestiones que no se ponen de acuerdo con respecto a temas de los hijos. Le digo que está bien, pero que probemos a ver qué aparece.
Las Constelaciones Familiares son reveladoras de las cuestiones ocultas y de los sentimientos no registrados, de la generación actual y de las anteriores, que están y tienen sus efectos. Por eso son una modalidad terapéutica que va a la raíz del conflicto, no al síntoma.
En el caso de José, le hice elegir representante (*) para su primera mujer y lo puse a él mismo para hacer la constelación. Cuando se puso frente a ella, le dije que por un rato se miraran a los ojos. Al cabo de algunos minutos José empezó a angustiarse y dijo: _ la lastimé, no se lo merecía. La representante de la primera mujer sentía mucho enojo. (Observen que José dijo que estaba todo tranquilo y que sólo tenías algunas asperezas por temas de los hijos.)
Se continúa aportando orden en este vínculo con frases sanadoras y gestos de honra tanto en uno como en el otro y de este modo el enojo de la mujer se transforma en tristeza primero y en calma después y la angustia de José se alivia al hacerse cargo de su parte de responsabilidad. También quedan expuestos los reconocimientos pertinentes entre ambos. La tensión del comienzo se disipa y ahí le pido que elija representantes para sus dos hijos, y los ubique. José y la representante de la primera mujer les manifiestan a ambos hijos el respeto y el reconocimiento mutuo entre ellos. Los hijos sienten un gran alivio.
También la primera mujer debe ser reconocida por la mujer actual porque ésta tiene un lugar gracias a que la primera dejó libre ese lugar.
Como verán, José estaba aún atado a su primera pareja en el sentido de que la relación estaba contaminada por lo no resuelto en la misma. Con esta carga de sentimientos ocultos pero eficaces ¿cómo puede su relación actual estar bien?
Del mismo modo, cuando el vínculo con los padres está desordenado, tampoco es posible estar bien en pareja y muchas veces impide tenerla.
Las Constelaciones Familiares ayudan a resolver esos temas inconclusos. Limpiando las “cuestiones que pesan” del pasado se libera el presente, que así podrá llevarse adelante.
(*) En constelaciones se trabaja con representantes que son personas elegidas del grupo para que representen a los miembros del sistema con los que se va a hacer la constelación. Éstos perciben sensaciones físicas y sentimientos de las personas a las que representan y esto es clave para realizar la constelación.